Camino viejo de Llíria, 93.Tf.963498771.Precio medio: 45 euros.Escondido entre el casino de Valencia y un barrio de nueva construcción encontramos uno de los restaurantes más bellos de la ciudad. Una vieja casa burguesa que no ha necesitado la mano de ningún interiorista de prestigio para resultar tremendamente cálida y acogedora. Pablo Chirivella ha respetado cada rincón y cada detalle de la casa de manera que los comedores se reparten íntimos y discretos por todas las dependencias del edificio. Cada zona tiene su punto. La vieja cocina tiene un aire familiar y luminoso, el antiguo comedor cierto porte aristócrata y la antigua sastrería donde su abuela probaba a las clientas un entorno cómplice.
- Tuétano a la brasa con setak tratar
- Sardina y pulpo marinado con chile habanero a la brasa
Tavella ha mejorado mucho en este par de años que lleva de rodaje. Para empezar la oferta es ahora más amplia y flexible. Cuando Pablo inauguró el restaurante no había carta, sino un menú único que partía de unas tapitas creativas y podía acabar en carne, pescado o arroces. Ahora, para empezar hay más menús, que van desde los 29 euros hasta los 46 en función del número de platos. Además, hoy Pablo da la oportunidad al cliente de ir más allá de los menús y ofrece una buena lista de sugerencias. Si en las entradas de los menús deja caer siempre un toque de
creatividad (muy supeditada al producto), en las sugerencias se decanta por la materia prima pura y dura: gambas, cigalas, ostras, jamón, parpatana de atún…
- Anchoa con membrillo y tomat
- Pimiento relleno de txangurro y rape
Tanto en los menús como en las sugerencias las mejores propuestas vienen de las brasas. La gran parrilla que preside la cocina se ha convertido en la estrella del local. De allí salen grandes pescados (como rodaballos o corvinas) que se acompañan con diversas salsas por si al cliente le apetece combinar (cosa innecesaria porque acabarían ocultando el sabor del pescado). En ocasiones aparecen pescados de playa como besugos, dentones o lubinas que cuestan un poco más caros (se cobra un suplemento) pero resultan más interesantes. También de esa parrilla sale una buena ostra a la brasa o un pulpo que se marina previamente en chile habanero. De entre las tapitas creativas hay cosas muy interesantes, como esa especie de ensalada que hace con napicol, fenoll y tonyna de sorra o el tuétano asado a la brasa que combina con un steak tartar un puntito subido de mostaza.

Corvina a la brasa
Pablo se atreve con todo tipo de arroces, desde la tradicional paella valenciana hasta una innovador arroz de remolacha y encurtidos pasando por un canónico arròs en fesols i naps. Eso sí, para los arroces tradicionales es necesario advertirlo en la reserva con un par de horas de antelación.

Pablo Chirivella frente a uno de sus chuletones
Además de esta oferta más completa y con más producto, Tavella ha mejorado también todos los aspectos de la sala. Ha construido una gran bodega vista que se ha preocupado de llenar con buenos vinos que no desgarran bolsillos y ha fichado a personal competente y bien formado. Como maitre actúa Toni Comeche (que trabajó durante muchos años en El Canyar) y como sumiller Sara López (una joven promesa formada con el grupo La Sucursal).
Maravilloso sitio comida autentica delicioso ambiente de tranquilidad parece estar en familia
Da gusto ir. Tranquilo, producto de calidad, servicio esmerado. Cocina elaborada pero sin estropear el producto.Enhorabuena!!!
Y el espacio, José Enrique, esa vieja casona es súper agradable